La diferencia entre oír y escuchar es algo que muchos desconocen, aunque parezca increíble. Lo sé porque me he topado con bastantes personas que los interpretan como sinónimos, cuando en realidad en lo único que coinciden es que ambos están relacionados con la percepción de sonidos.
¿Emoción y sentimiento es lo mismo? ¿Podría decir alimentación en lugar de nutrición? No, porque aunque tengan una raíz común, en la práctica ninguno de estos términos puede sustituir al otro.
Esto es lo que sucede en este caso particular. La mayoría de las personas tiene la capacidad de oír, pero en realidad son muy pocas las que saben escuchar.
Esta inquietud, y varias situaciones con las que me he encontrado durante mi ejercicio profesional, me llevaron a reflexionar sobre qué es escuchar y por qué esta es una de las cualidades más importantes de un líder. Si tú nunca te lo has preguntado, te invito a acompañarme en este texto.
¿Qué es oír?
Oír es la capacidad que tienen las personas de percibir los sonidos. Se trata de una acción completamente involuntaria y pasiva que depende únicamente del sistema auditivo. Debido a esto no siempre estamos atentos a lo que oímos y, por lo tanto, no todas las cosas que están en el ambiente son procesadas por el cerebro.
¿Qué es escuchar?
Escuchar también es un proceso auditivo, pero aquí también toma un papel importante el cerebro. Se trata de un proceso que involucra atención para procesar y comprender lo que se está oyendo.
Escuchar es algo que se desea, por lo tanto esta información se recibe con toda la actitud de aprender de ella, tomarla en cuenta o disfrutarla. Es así cómo se mantienen las conversaciones fluidas o se escuchan podcasts, por ejemplo.
¿Cuál es la diferencia entre oír y escuchar?
Me parece importante destacar qué es oír y escuchar porque hay muchas personas que llevan esta pequeña confusión de términos a su vida o a la práctica profesional, y aseguran saber escuchar cuando en realidad solo oyen.
Así que no está de más hacer una comparación oír vs escuchar:
- Oír es un proceso fisiológico inherente al ser humano, escuchar es una capacidad que requiere de atención, interés y concentración.
- Oír es una acción pasiva e involuntaria, escuchar requiere actividad y esfuerzo.
- Oír tiene que ver con captar ondas sonoras, escuchar se trata de interpretarlas.
Se oye el ruido de la lluvia, los gritos lejanos de los niños cuando juegan o las conversaciones indistintas en los restaurantes. En cambio, se escucha una conversación, tu música favorita o una película.
Ahora queda claro que la diferencia entre oír y escuchar se encuentra en la intencionalidad. Los sonidos, las personas que quieren conversar contigo sobre algún problema, darte alguna idea o pedirte retroalimentación siempre se van a oír. Depende de ti escucharlos o no.
¿Por qué un buen líder debe escuchar?
El entender cuál es la diferencia entre oír y escuchar es una de las habilidades más importantes que un líder debe tener, y a la que menos atención se le presta. Claro que es importante desarrollar herramientas para dirigir equipos y para comunicarte con elocuencia, pero si quieres distinguirte de los demás, te recomiendo comenzar a prestar verdadera atención a lo que pasa a tu alrededor.
Los líderes saben cómo escuchar primero para hablar después. Con esto no quiero decir que estés haciendo algo mal o que aprender esto sea algo sencillo. Estamos hablando de un reto que pocos se atreven a asumir.
Hacer una verdadero enfrentamiento escuchar vs oír se trata de un esfuerzo que trae beneficios en los que seguro ni siquiera habías pensado, te expongo algunos:
- Escuchar con atención es una forma de aprender, porque nadie adquiere conocimientos solo de sí mismo. Quizás alguno de los miembros de tu equipo tiene la idea para que tu empresa alcance un nuevo nivel de ventas y no la conoces porque no te has tomado el tiempo para escuchar con atención lo que tiene para decir.
- Prestar verdadera atención a los problemas, aunque sean muy pequeños, te ayuda a evitar que los conflictos se agraven. Un buen líder sabe que al mantener los oídos abiertos y la mente alerta puede obtener información precisa.
- El escuchar crea una verdadera relación de confianza con los trabajadores y colaboradores. Esto es importante porque ayuda a construir un ambiente en el que todos se sienten libres de expresar sus opiniones, ideas y sentimientos. Así es como sabrás cuáles son las cosas que estás haciendo bien y lo que hace falta mejorar.
- Un líder que escucha se vuelve uno con su equipo y por ende comienza a tomar mejores decisiones, disminuye los conflictos y crea un ambiente altamente productivo.
Al tener clara la diferencia de oír y escuchar comienzas a valorar estas habilidades dentro de tu día a día. Y créeme, si aprendes cómo aprovecharlas, verás como los beneficios llegarán por sí solos.
Aprender a escuchar, algunas recomendaciones
“Kendrith ¿Qué puedo hacer para comenzar a escuchar mejor?” Ahora que conoces la diferencia entre oír y escuchar, mi primera recomendación es que te propongas hacerlo de manera consciente. El interés debe salir de ti, con eso ya tendrás gran parte del trabajo hecho. Pero si además aplicas estas técnicas, podrás reforzar tu progreso:
Haz preguntas
Al hacer preguntas le demuestras a la persona que habla contigo que de verdad estás interesado y que quieres saber más al respecto. Es también una forma de incentivar la conversación y llevarla a nuevos lugares.
Evita hacer juicios
Al establecer juicios de valor rompes la fluidez de la conversación y dejas de escuchar. De esta forma solo consigues afectar la autoestima o disminuir la confianza de la persona que habla, incluso puede hacer que no quiera volver a conversar contigo.
No interrumpas
Aunque no estés de acuerdo con lo que te están contando, deja que las personas expongan sus ideas hasta el final para después hablar. Las interrupciones van en contra de la escucha activa e interrumpen el flujo de la conversación. Un buen líder es un oyente paciente.
Conocer la diferencia entre oír y escuchar es fundamental para convertirte en un líder excelente. Atrévete a entrar en contacto con nuevas ideas y descubre cómo esto puede ayudarte a progresar, una persona que solo oye las opiniones de los demás se niega al progreso.
Haz que tu principal trabajo sea promover espacios de confianza en los que todos puedan sentirse escuchados y valorados.
Espero con ansías poder ver tus progresos. Te mando un abrazo.
Kendrith Rodríguez.